martes, 21 de julio de 2009

ORACION A JESUS CRUCIFICADO


Heme aquí mi amado y buen Jesús, que postrado a vuestros pies, os ruego con el mayor fervor que imprimáis en mi corazón vivos sentimientos de fe, esperanza y caridad, verdadero dolor de mis pecados y propósito de nunca más ofenderos. Mientras que yo con todo dolor y compasión, voy considerando vuestras cinco Llagas, y aquellas palabras que de Vos decía el Santo Profeta David: Han taladrado mis manos y mis pies y se pueden contar todos mis huesos.

lunes, 20 de julio de 2009

AMAR ES CONDIVIDIR

Desde que nos comprometimos el uno con el otro, se ha creado entre nosotros una comunidad, hecha que todo lo que hemos puesto en común.
Hemos decidido unir nuestras dos vidas; tenemos ya el mismo destino. El largo camino que se abre delante de nosotros, lo recorremos juntos.
La comunidad de vida que se ha establecido entre nosotros se realizará plenamente en el matrimonio, cuando finalmente "viviremos juntos". Habrá toda la vida para desarrollarla, enriquecerla, profundizarla. Pero ya ahora mismo la estamos construyendo, día tras día. Poner en común todo lo que somos y tenemos, requiere diálogo, intercambio, comunicación. Amar es conocerse; es el esfuerzo de "dejarse conocer dentro".
Amar es aprender a aceptarse a sí mismo y aceptar al otro; con los propios límites, con los propios méritos y defectos. Es saber aceptar el complemento que viene del otro, así como su ayuda.
Si aprendemos a aceptarnos, a poner en común nuestros proyectos, entonces el amor crece.
Quien ama verdaderamente, sale de su egoismo. Descubre que aunque se vivda "juntos" se puede ser egoista. Nuestro amor para crecer tiene necesidad de crecer: se prolonga en nuestros hijos; se prolonga en los demás.

EL AMOR SE PROLONGA EN LOS HIJOS.

domingo, 12 de julio de 2009

NOSOTROS SOMOS UNA PAREJA


La vida en común crea vinculos siempre más estrechos. El amor nos transforma, nosotros cambianos. Quién está cerca de nosotros da cuenta, y si pensamos, también nosotros nos damos cuenta.
Al inicio, tú eras para mí "la persona con quien estaba bien". Después, en mis pensamientos has tenido siempre más puesto; no lo graba más pensar en mi futuro sin tomarte en cuenta a tí. Has llegado a ser "la persona de mi vida". Cualquier cosa que me pase, buena o mala, pienso en tí; cuando te lo diga, qué pensarás tú......?
Primero, éramos "Yo" y "Tú". Ahora ha nacido el "Nosotros". Estamos llegando a ser una pareja: no podemos más vivr el uno sin el otro. Ni siquiera nos damos cuenta cuánto el amor noa ha transformado. Cada uno de nosotros se siente mayor, más prepado, más adulto de lo que estana hace seis meses o un año.


NO UNA PAREJA CUALQUIERA, SINO "NUESTRA PAREJA"
Esta transformación dura toda la vida. El amor tiene en sí la exigencia de novarse, de crecer. El esfuerzo de pensar en el otro, de ver las cosas con los ojos del otro, es lo que nos permite superar todas las dificultades. Porque la felicidad no viene de nosotros mismos, sino del otro.
Si estamos atentos, descubriremos poco a poco que nuestro amor es más grande que nosotros. Nosotros no somos la fuente, sino el amor está en nosotros, el amor mismo de Dios. Porque......
Este momento de nuestra vida es un momento privilegiado para "sentr" a dios más cerca. ¡Estamos viviendo en el Amor de Dios!


"DIOS ES AMOR" (1ra de Juan 4, 8)

Es la ocasión buena para analizar a fondo nuestra fe y el modo de vivirla, a la luz del Amor.
Nos daremos cuenta que Dios tiene un proyecto sobre nuestro amor, que quiere nuestra felicidad, a través de cambios que nosotros deberemos descubrir y recorrer juntos.

domingo, 5 de julio de 2009

TU Y YO DOS PERSONAS DIFERENTES

Tú eres hombre, yo soy mujer: toda nuestra persona
está profundamente sexuada.
Nos damos cuenta, vemos que nuestras
reacciones son distintas.
Tú tienes tu caracter, tu temperamento, tus gustos,
yo tengo los míos; y a veces son muy diversos de los tuyos.
Tú has vivido en un ambiente, yo en otro.
Nuestras familias nos ha dado hábitos,
tradiciones, modos de ser diversos.
Nuestras historias son diversas.
Tú tienes tu trabajo, tus amgos, tus desahogos.
Y cada uno de nosotros tiene su idea sobre la vida, la política,
la sociedad, Dios el amor y sobre el dinero.

Todo ésto explica cómo nosotros no tenemos
siempre las mismas necesidades, los mismos deseos,
las mismas aspiraciones.
De aquí resulta, ya sea la inmensa riqueza de
nuestro vivir juntos, ya sea nuestras dificultades.
Somos dos personas diversas.
Tenemos cada uno nuestra personalidad.
Cada uno de nosotros debe no sólo respetar la personalidad
del otro sino también ayudarlo a realizarse.
Por ésto, es necesario que nos conozcamos siempre mejor.
Esforcémonos e dejarnos conocer en la
verdad de la vida de cada día:
Familia, Trabajo, amistades Actividad, Diversones.
Un conocimiento hecho sólo cuando salimos
juntos para divertirnos, corre el peligro de
permanecer superficialy errado.
Seamos sinceros hasta lo último; prestemos atención
"al otro". En la vida de cada uno,
Dios se hace conocer progresivamente.
La fe no llega del "saber", del estudio, sino del encontrar
a Dios en la vida de cada día.
Quien tiene fe sabe muy bien que camina con Dios,
y que camina con El en el amor.

NOS HEMOS ELEGIDOS

Un día nos hemos elegidos y hemos decidido unir uestras vidas.
Ha comenzado con un encuentro, con una simpatía.
Después hemos salido juntos, hemos descubierto que juntos estabamos bien.
Nos hemos dicho: "¿Por qué no nos casamos?",
sin poder explicar claramente las rezones de nuestra elección,
sentiamos que estábamos hechos el uno para el otro.
A veces nos sucede que nos paramos a reflexionar y descubrimos
entonces nuevos motivos para amarnos.
En efecto, con el pasar del tiempo, nos conocemos mejor.
Reflexionamos juntos sobre las razones de nuestra elección:
esto nos ayuda acerca el uno al otro.
Probamos juntos este descubrimiento maravilloso y progresivo.
Acaso, descubrimos juntos que, más que aquello nosotors pensamos,
Dios ha guiado nuestros pasos por su gran designio de amor.
No nos hemos encontrado "por casualidad".
El creyente sabe que Dios está presente en su vida.
Estamos realizando un plan maravilloso.
¡Un plan que Dios ha pensado para los dos!
El noviazgo es una respuesta a una vocacion: la vocación del amor.
Es Dios quien invita a amor en el noviazgo,
y a vivir despúes el amor en el matrimonio.

Cohélet Hijo de David, excelente tú sabiduría

Eclesiastés 1, 1-18 Palabras de Cohélet, hijo de David, rey en Jerusalén. ¡Vanidad de vanidades! - dice Cohélet -, ¡vanidad de vanidades, to...