sábado, 24 de octubre de 2009

HAY QUE ESCOGER LO MEJOR

La garganta puede pasar cualquier alimento,
pero hay unos alimentos más sabrosos que otros.
El paladar distingue los sabores,
y la inteligencia distingue las mentiras.
Una mente malvada causa sufrimientos,
pero el hombre fuerte se los devuelve.
La mujer a cualquiera como esposo,
pero hay mujeres más bonitas que otras.
Ver una mujer bella es un placer,
no hay nada más agradable;
y si además es afable en su conversacion,
su marido no tiene entre los hombres.
El que obtiene esposa comienza hacer fortuna,
y tiene ayuda, protección y apoyo.
Un viñedo sin cerca es saqueado,
y un hombre sin esposa anda de un lugar a otro.
¿Quién confía en una banda de gente armada
que va de ciudad en ciudad?
Así es el hombre que no tiene nido,
que descansa donde la noche lo sorprende.

Eclesiastico; 36, 18-27

lunes, 12 de octubre de 2009

LOS SUEÑOS

Los tontos viven de falsas esperanzas;
los sueños dan alas a los insensatos.

Creer en los sueños es querer agarrar
una sombra o perseguir el viento.

Lo que uno ve en sueños es solo una imagen,
como un rostro revelado en un espejo.

Nada limpio puede venir de la suciedad;
ninguna verdad puede tampoco venir de la mentira.

Advinaciones, pronósticos y sueños son cosas sin valor;
fantasias como las mujer de parto.

Si no viene de parte del Altisimo,
no les prestes la menor atención.

Porque muchos se dejaron engañar por los sueños,
y por creer en ellos se arruínaron.

Hay que cumplir la ley son hacer trampas;
el hombre de fiar enseña la perfecta sabiduría.


Eclesiástico: 34, 1-8

EL SEÑOR ESCUCHA NUESTROS RUEGOS


Señor, mi protector, a ti clamo.
¡No te niegues a responderme!
Pues si te niegas a responderme,
ya puedo contarme entre los muertos.
Oye mis gritos cuando te pidor ayuda,
cuando extiendo mis manos hacia tu Santo Templo.
No me arrastres junto con los malvados,
no me hagas correr la suerte de los malhechores,
que por fuera se muestran amistosos
pero por dentro son todo maldad.
Dales su merecido, conforme a sus malas acciones,
pagales con la misma moneda, conforme al mal que han cometido.
Ya que no tienen presentes las cosas que hizo el Señor,
¡que él los destruya y no los vuelva a levantar!
¡Bendito sea el Señor, que ha escuchado mis ruegos!
El Señor es mi poderoso protector, en él confié plenamente, y él me ayudó.
Mi corazón está alegre; cantaré y daré gracias al Señor.
El Señor es la fuerza de su pueblo; es ayuda y refugio de su rey escogido.
Salva a tu pueblo, señor, Bendice a los tuyos.
Cuidalos como un pastor, ¡llévalos en tus brazos para siempre!


Salmo; 28.

viernes, 2 de octubre de 2009

ORACION DE JEREMÍAS

¡Señor, préstame atención!
¡Oye lo que dicen mis enemigos!
¿Es con el mal como se paga el bien?
¡Ellos han cavado mi sepultura!
Recuerda que me he enfrentado contigo
para hablarte en favor de ellos,
para pedirte que apartaras de ellos tu ira.
¡Pero ahora, haz que sus hijos mueran
de hambre o a filo de espada;
que queden viudas y sin hijos sus esposasa!
¡Que la peste mate a sus hombres
y sus jóvenes caigan en el campo de batalla!
En vía de repente contra ellos
una banda de ladrones;
¡que se oigan sus gritos de terror!
Porque cavaron un hoyo para atraparme,
pusieron trampoas a mi paso.
Pero tú, Señor, conoces todos los planes
que han hecho para darme muerte
¡No les perdones su maldad
ni olvides sus pecados!
¡Hazlos caer delante de ti,
castigalos con ira!

Cohélet Hijo de David, excelente tú sabiduría

Eclesiastés 1, 1-18 Palabras de Cohélet, hijo de David, rey en Jerusalén. ¡Vanidad de vanidades! - dice Cohélet -, ¡vanidad de vanidades, to...