Señor muchos son mis enemigos, muchos son los que se han puesto en contra mia,
¡muchos son los que dicen de mi: "Dios no va a salvarlo"!
Pero tú, Señor, eres mi escudo protector, eres mi gloria, eres quien me reanima.
A gritos pido ayuda al Señor y él me contesta desde su monte santo.
Me acuesto y duermo, y vuelvoa despertar, porque el Señor me da su apoyo.
No me asusta ese enorme ejército que me rodea dispuesto a atacarme.
¡Levántate, Señor! ¡Sálvame, Dios mío! Tú golpearás en la cara de mis enemigos;
¡les romperás los dientes a los malvados!
Tú, Señor, eres quien salva; ¡Bendice, pues, a tu pueblo!
¡muchos son los que dicen de mi: "Dios no va a salvarlo"!
Pero tú, Señor, eres mi escudo protector, eres mi gloria, eres quien me reanima.
A gritos pido ayuda al Señor y él me contesta desde su monte santo.
Me acuesto y duermo, y vuelvoa despertar, porque el Señor me da su apoyo.
No me asusta ese enorme ejército que me rodea dispuesto a atacarme.
¡Levántate, Señor! ¡Sálvame, Dios mío! Tú golpearás en la cara de mis enemigos;
¡les romperás los dientes a los malvados!
Tú, Señor, eres quien salva; ¡Bendice, pues, a tu pueblo!
Salmo; 3
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